Si eres un profesional de RRHH, seguramente te hayas enfrentado a alguno de estos retos: mejorar la reputación de tu marca corporativa, atraer y retener el talento que necesitas, reducir el coste de contratación o mejorar la experiencia del empleado. Estos son algunos de los beneficios que puede aportarte el employee branding, una estrategia que consiste en crear y comunicar una imagen positiva y diferenciada de tu empresa.
El employee branding no es solo una cuestión de marketing, implica a toda la organización y a sus valores, cultura y propósito. Se trata de alinear lo que dices con lo que haces, y de transmitirlo tanto interna como externamente. De esta forma, podrás generar confianza, compromiso y orgullo de pertenencia entre tus empleados actuales y potenciales.
¿Cómo implementar una estrategia efectiva de employee branding?
Aprovecha la propuesta de valor de tu empresa. ¿Qué te hace único? ¿Qué ofreces a tus empleados que te diferencia de la competencia? Identifica y comunica los aspectos más atractivos y relevantes de tu propuesta de valor, tanto en términos de retribución, beneficios, desarrollo profesional, conciliación, etc.
Audita la imagen de tu empresa. ¿Qué percepción tienen tus empleados y candidatos sobre tu empresa? ¿Qué opinan de ti en las redes sociales, portales de empleo o plataformas de evaluación? Realiza un análisis exhaustivo de tu reputación online y offline, y detecta las fortalezas y debilidades.
Optimiza la imagen de marca. Una vez que hayas identificado los aspectos a mejorar, trabaja en ellos para ofrecer una imagen coherente, auténtica y atractiva. Cuida todos los puntos de contacto con tus públicos internos y externos, desde el diseño de tu página web o tu perfil en LinkedIn, hasta el tono y el contenido de tus comunicaciones o el feedback que das a tus candidatos.
Aprovecha a los empleados actuales para la difusión. Tus empleados son tus mejores embajadores, ya que pueden transmitir su experiencia y opinión de forma más creíble y cercana que cualquier otro medio. Fomenta su participación en las redes sociales, incentiva sus recomendaciones, reconoce sus logros y celebra sus éxitos. Así, podrás generar un efecto multiplicador y viral que potencie tu visibilidad y prestigio.
Cultiva un proceso de incorporación sólido. El primer contacto con tu empresa es clave para generar una buena impresión y sentar las bases de una relación duradera. Diseña un proceso de onboarding que sea ágil, personalizado y eficaz, que facilite la integración del nuevo empleado en su equipo y en la cultura de la empresa, que le proporcione la información y los recursos necesarios para su desempeño, y que le haga sentir valorado y motivado desde el primer día.
Ofrece oportunidades de aprendizaje y desarrollo. Uno de los factores que más influyen en la satisfacción y la retención del talento es la posibilidad de crecer profesionalmente dentro de la empresa. Para ello, es importante que ofrezcas a tus empleados planes de formación continua, feedback constructivo, mentoring, etc. Así, podrás mejorar sus competencias, su rendimiento y su compromiso con la organización.
Utiliza medios digitales para una mayor y mejor presencia. La digitalización ha supuesto un cambio radical en la forma de comunicarse con los empleados y candidatos. Hoy en día, es imprescindible contar con una estrategia digital que te permita llegar a tu público objetivo con mensajes adaptados a sus intereses, preferencias y hábitos de consumo.
Incluye iniciativas sólidas de diversidad e inclusión. La diversidad es un valor añadido para cualquier empresa, ya que aporta innovación y competitividad. Pero no basta con tener un equipo diverso, sino que hay que garantizar que todos los miembros se sientan respetados, integrados y valorados por su aportación. Para ello, es necesario implementar políticas y acciones que promuevan la igualdad de oportunidades, la no discriminación, la concienciación y la participación de todos los empleados.
Como ves, el employee branding es una estrategia que puede reportarte múltiples beneficios, tanto a nivel interno como externo. Pero, ¿por dónde empezar? Una buena forma de dar los primeros pasos es realizar un discovery para detectar los puntos débiles de tu imagen y diseñar un plan de acción para mejorarla. También puedes crear un portal del empleado atractivo, corporativo e intuitivo, que sea el punto de encuentro entre tu empresa y tus empleados, y que refleje tu identidad, valores y cultura.
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