Como consultora de adopción digital y gestión del cambio, uno de los retos a los que me enfrento a menudo es la brecha digital que separa a los empleados y la tecnología.
Existen muchas formas de abordar este desafío y facilitar una transición exitosa hacia un entorno más digital, pero me gustaría poder compartir algunas de las que, desde mi experiencia, funcionan en la mayoría de los casos:
1. Comprender la brecha digital a la que vamos a enfrentarnos
Antes de implementar cualquier solución, es fundamental que comprendamos la brecha digital en el contexto específico de cada organización. ¿Cuáles son las habilidades digitales que faltan? ¿Qué herramientas tecnológicas son necesarias? ¿Cuáles son los obstáculos culturales o de resistencia al cambio? Realizar una evaluación exhaustiva es el primer paso.
2. Comunicación clara y constante
Esta es una de las claves que se repite en todos los procesos de éxito, no solo para abordar la brecha digital, sino para cualquier proceso o proyecto que implique cambios o alteraciones en el día a día de los empleados, sus procesos de trabajo y las herramientas que emplean.
Explicar el “por qué” detrás del cambio digital es esencial para ganar la confianza de los empleados. A veces a través de workshops, charlas o sesiones informativas que nos permitan abordar sus inquietudes y mostrar cómo la tecnología puede mejorar su trabajo diario.
3. Formación personalizada y adaptada
No existe una talla única para la formación digital. Adaptar los programas a las necesidades individuales es crucial. Algunos empleados pueden requerir cursos básicos sobre herramientas de colaboración y comunicación, mientras que otros pueden necesitar formación avanzada en análisis de datos o automatización de procesos.
4. Crear una cultura de la experimentación
Fomentamos la mentalidad de “prueba y error”. Invitando a los empleados a explorar con las nuevas herramientas y aplicaciones. La innovación no surge sin riesgos.
5. Acompañamiento personalizado
En muchas ocasiones es importante establecer un equipo de soporte dedicado para resolver problemas y responder preguntas. Este puede tener muchos formatos, por ejemplo, poner a disposición de los empleados una página de reservas que les permita tener tiempo con un experto, de forma individualizada, para que este los acompañe y les ayude.
6. Recursos digitales
Es esencial proporcionar acceso a recursos digitales, video tutoriales y/o documentación para que los empleados puedan consultar en cualquier momento y seguir aprendiendo a su propio ritmo.
En definitiva, existen muchas más herramientas que podemos utilizar, dependiendo de cada caso y cada necesidad. Estas son solo algunas de las que empleamos desde Raona en nuestro día a día. ¿Quieres que hablemos de cómo afrontar la brecha digital de tus empleados? ¡La tecnología no se para, no dejemos a nadie atrás en el proceso!