La colaboración entre equipos es un factor clave para el éxito de cualquier organización. Sin embargo, muchas veces los equipos trabajan de forma aislada, sin una visión compartida ni una coordinación efectiva. Esto puede generar problemas de comunicación, duplicidad de esfuerzos, falta de alineación y pérdida de oportunidades. ¿Cómo podemos mejorar la colaboración entre equipos y lograr que todos remen en la misma dirección? Una posible respuesta es la metodología OKR.
OKR son las siglas de Objectives and Key Results (Objetivos y Resultados Clave). Se trata de una metodología que permite definir y medir los objetivos de una organización, así como los resultados que se esperan alcanzar para cumplirlos. Los OKR se establecen de forma periódica (normalmente trimestral o anual) y se comunican a todos los niveles de la organización, desde la alta dirección hasta los equipos operativos. De esta forma, se consigue que todos los empleados conozcan los objetivos estratégicos de la empresa y cómo contribuyen a ellos con su trabajo.
Aunque no se haga a nivel corporativo, el uso de OKR puede tener un impacto muy positivo en la colaboración entre equipos, ya que ofrece una serie de beneficios que favorecen el trabajo en equipo y la cultura organizacional. Consensuar los objetivos para una mejor colaboración y trasladarlo a resultados concretos y medibles es un gran paso de madurez organizativa y del aprovechamiento del Digital Workplace. Algunos de estos beneficios son:
- Claridad en los Objetivos: Los OKR permiten definir objetivos claros, específicos, medibles, alcanzables y relevantes para la organización. Cuando los objetivos son comprensibles, la colaboración se vuelve más efectiva, ya que cada equipo sabe exactamente qué se espera de ellos y cómo se evaluará su desempeño.
- Transparencia y Visibilidad: Los OKR no solo se definen, sino que también se hacen visibles para toda la organización. Esto mejora la comunicación interdepartamental y facilita el seguimiento del progreso de los objetivos. Además, al hacer públicos los OKR, se fomenta la rendición de cuentas y el compromiso de los equipos con sus resultados.
- Enfoque en Resultados Medibles: Los OKR no solo se centran en lo que se quiere lograr, sino también en cómo se va a medir el éxito. Para ello, se establecen indicadores clave que permiten evaluar el grado de cumplimiento de los objetivos. Estos indicadores deben ser cuantitativos, relevantes y verificables. Así, los OKR permiten a los equipos conocer su avance y detectar posibles desviaciones o áreas de mejora.
- Agilidad y Adaptabilidad: Los OKR no son estáticos, sino que se revisan y actualizan periódicamente. Esto permite a los equipos adaptarse rápidamente a los cambios en el entorno empresarial, ajustando sus objetivos y estrategias en tiempo real. Además, al tener ciclos cortos de planificación y ejecución, los OKR favorecen la innovación y la experimentación.
- Creación de una Cultura de Alto Rendimiento: Los OKR desafían constantemente a los equipos a superar sus propios límites y a buscar la excelencia. Al establecer objetivos ambiciosos pero realistas, los OKR motivan a los empleados a dar lo mejor de sí mismos y a buscar soluciones creativas. Además, al celebrar los logros y reconocer el esfuerzo, los OKR generan un clima de confianza y colaboración entre los equipos.
La metodología OKR ha sido adoptada por empresas líderes en el mundo digital, como Google, Spotify o LinkedIn. Estas empresas han comprobado cómo los OKR les han ayudado a mejorar la colaboración entre equipos, impulsando su rendimiento y fomentando una cultura de trabajo cohesionada. En Raona hemos usado esta metodología específicamente en el ámbito de la Colaboración en empresas como Almirall, donde se utiliza para optimizar el aprovechamiento de su Smart Hub y mejorar la colaboración corporativa.
En conclusión, la implementación de OKR revoluciona la forma en que los equipos colaboran dentro de una empresa. Los OKR funcionan como un facilitador poderoso del potencial colaborativo e incentivan a los equipos a romper silos y conectar con un propósito común. Y las áreas de la compañía con objetivos comunes y acordados necesitan herramientas para colaborar en los entornos digitales que les simplifiquen barreras digitales y les permitan focalizarse en lo importante: trabajar en equipos sin barreras.
Esperamos que estas recomendaciones ayuden a los responsables de organización y de colaboración a analizar los puntos de mejora de su Digital Workplace para alinear las necesidades y los objetivos de los empleados. En Raona estamos convencidos por nuestra experiencia en el desarrollo de soluciones de Modern Workplace en decenas de clientes que la clave del éxito es conseguir que los empleados se sientan parte activa de este proceso de transformación. ¿Hablamos?
